Cine y más cine

Con los premios Oscar a la vista (nunca mejor dicho), la cartelera está como nunca, pero yo casi no voy por falta de acompañante, pues sé que para mi hiperkinético esposo sentarse quieto un par de horas es una tortura, así es que no insisto en que vaya conmigo y debo esperar a que venga mi madre para regocijarnos  juntas con  el "biógrafo", como decía mi abuela, claro que ahora hasta es en 3D, cosas del progreso.
Ayer vimos "Amigos", basada en una historia real. Muy simpática y liviana; sorprendentemente un éxito grande para ser francesa. Hoy le tocó a Lincoln , muy bien caracterizada, con la que aprendí algo de historia, pero que no es para volverse locos, no; hay que estar muy atentos para no enredarse con tantísimos personajes que aparecen, unos para hacerles justicia y otros para dejarlos en evidencia, porque la encrucijada histórica lo amerita. Es algo pesada para el verano austral.
Mañana tenemos pensado ir a ver Argo, por los comentarios, nada más. Ya veremos si ha valido la pena, pero lo que es seguro es que habrán sido 3 películas absolutamente diferentes y eso me gusta además de la compañía de mi vieja.