sábado, 20 de abril de 2013

Una siesta: el mejor regalo


Han venido a visitarnos mi hija Tere y su familia, es decir su esposo y Juanito, mi nieto de 45 días. Llegaron a almorzar y después del postre nos preguntaron a mi marido y a mi si podríamos cuidar al niño mientras ellos dormían la siesta, cosa a la que con mucho gusto accedimos, ¡imagínate si no!, y acá estamos contemplando extasiados al pequeño mientras escribo y muevo con mi pierna el cochecito donde lo colocamos para que duerma.

Regalar una siesta a unos cansados padres primerizos es algo muy barato pero implica varias cosas y lo básico es la confianza que nos tienen para dejarnos las mamaderas, los pañales y toda la parafernalia para que nos encarguemos, y por nuestro lado aportamos la experiencia de haber criado 5 hijos, pero debo reconocer que los modos de hacer las cosas han cambiado por las nuevas tecnologías. Disponer de un microondas es un sueño cumplido Sólo hay que cuidar la temperatura para no quemarlo; tienen unos sets de biberones salidos directo de la NASA, parece, con todo medido, esterilizado, guardado y más de lo que imaginamos nosotros para facilitar la crianza, claro que también se han hecho más engorrosas las cosas y como ejemplo pongo las famosas sillas de niños, de las cuales no niego su importancia, pero antes, al no haber, no se echaban de menos y con sentarnos atrás con los niños ya era suficiente resguardo. Ahora no osaría salir sin esos adminículos por aquello de que jamás me perdonaría si algo les pasar o hubiesen estado en peligro.

14 comentarios:

  1. Ayyy como les entendiendo, una buena siesta a padres de bebés es un regalo impagable. Además si el regalo lo hace unos abuelos encantados de hacerlo, pues ya está. Me encanta que pases buena tarde con tu Juanito, y ten cuidado meciendo que luego te sale movidito el post. Un abrazo

    ResponderBorrar
  2. Gracias, amigo del sillón. Tú que tienes varios hijos sabes de desvelos, pero también de las alegrías que dan.

    Saludos

    ResponderBorrar
  3. Tengo una companera de colegio que estudio medicina y es madre soltera. Vive con sus papas y trabaja y hace muchos turnos en diferentes hospitales y por eso todo el tiempo tiene que dejar al hijo chico (acaba de cumplir 5 anios) con los abuelos del crio. Hace unos dos anios me acuerdo que escribio en Facebook que iba saliendo a la clinica porque sus papas habian chocado y llevaban al nino atras sin cinturon. El chico resulto bien machacado y por suerte parece que no iban muy rapido, porque si no, hubiera salido disparado por la ventana de adelante yo creo.

    ResponderBorrar
  4. Lo que siempre comparan las madres intergeneracionales son los pañales de antes con los ahora.

    ResponderBorrar
  5. Gran regalo, qué precioso es tener la disponibilidad. Bueno...y Juanito lo amerita.
    Te felicito una ve más.
    Un abrazo.

    ResponderBorrar
  6. Qué alegría tener un bebé en casa. Sus padres agradecerán mucho vuestra ayuda. un beso.

    ResponderBorrar
  7. ¡Ay qué bien con tu nietecito en casa! me encantan los bebes pequeñitos, son tan dulces y cuidando al nieto, fue un regalo para sus padres...me has recordado con tus palabras a mi madre que cuando iba con los peques miraba asombrada todos las cositas que tenemos ahora pero que antes no había y...al final acababa haciendo lo que ella hizo en su día...jaja, antes no había esas cosas pero todo lo que sea hacer la vida más cómoda pues mejor...un abrazo y a disfrutar de tu nietecito y tu familia. Un abrazo!

    ResponderBorrar
  8. ¡Que ilusión AleMamá!
    Estoy loca por un nieto, pero estos no están por la labor.
    Tienes toda la razón. En nuestra época no había tantas cosas. Ahora salir con un bebé es como una mudanza al Africa, sillas, sillas de coches, cunas portátiles y miles de artilugios para la comida, dormida...
    Te he imaginado escribiendo y meciendo a Juanito y me ha encantado la imagen :D
    Besazo y difrútalo

    ResponderBorrar
  9. Muy tierno, Ale.

    Me hizo gracia lo que dice DOLEGA, acerca de que "ahora salir con un bebé es como una mudanza al África".

    ResponderBorrar
  10. Una anécdota impresionante, Alemamá! Cuando empecé a leer, pensaba que la siesta era para el pequeño, pero probablemente, sus padres la necesitaban más. Yo soy totalmente partidaria de la siesta, aunque no pueda hacerla más que días contados.

    Un abrazo fuerte!

    ResponderBorrar
  11. Que suerte poder cuidar a tu nieto. Disfrutalo todo lo que puedas. Besos.

    ResponderBorrar
  12. Fue un regalo mutuo, tú a ellos el descanso y ellos a tí el tiempo con tu nieto y la confianza depositada.

    Es verdad que las cosas han cambiado mucho, que hay adelantos y cachibaches que hacen más fácil la vida de los padres en cuanto a comodidad con los pequeñines, pero, dime, ¿no es un engorro después, buscar sitios para almacenar y guardar todo lo que se ha utilizado por un relativo pequeño espacio de tiempo?

    Besos apretaos, Ale.

    ResponderBorrar
  13. Hoy en dia hay tantas cosas que nos facilitan la vida y quizas no podriamos a hacer a menos de ellos ,por ejemplo el microondas nos hace ganar tiempo y simplifica las cosas.Espero que hayas disfrutado de ese corto tiempo de tu nietecito.Un abrazo.

    ResponderBorrar