Un rincón para detenerse con buen clima en general. Como en todos los sitios, acá no faltarán los nubarrones, pero con que pasen, ¡todo en su lugar!



viernes, 8 de julio de 2011

Silbar ¿Es tan extraño como parece?


¿Silbar es malo? ¿O es malo en una mujer? ¿O sólo en alguien que pretende ser una dama fina, dentro de lo posible? Es que me gusta silbar y lo hago todo el día y toda mi vida, desde que pude hacerlo sin que me salieran solo sonidos poco claros y, definitivamente, nada elegantes. Lo pregunto porque mi madre siempre lo ha detestado y al pasar los años y pasar a ser harina de otro costal ya no me dice nada, pero el otro día la oí comentando con una persona a la que le extrañó que yo lo hiciera y el díalogo fue más o menos así: _¿Quién está silbando? _La Ale. _¿La ALE? _Sí, lo hace siempre......

No es la primera persona ni país en que he escuchado esta opinión. Para mi es un modo como cualquiera de estar feliz y demostrarlo.

15 comentarios:

Gabriela dijo...

Para mí también es una manifestación de alegría: el que silba está feliz.
Nunca me podido hacerlo bien. Admiro a aquellos que logran silbar melodías enteras de manera identificable.

AleMamá dijo...

NOTA: En mi país usamos el artículo antes del nombre de una mujer, por eso se refieren a mi como "LA" Ale. Para referirnos a un hombre decimos simplemente es Federico, sin artículo. Al contrario, decir:Ale es la que silba, nos suena cursi y anteponer el artículo definido antes que el nombre de un hombre nos chirria en los oídos pues suena horriblemente vulgar....¡cosas del habla de mi país! No puedo explicar el por qué.

Ale Jr. dijo...

La Omi un dia me oyo silbar (se escribe con B en todo caso) y me hizo un comentario asi como diciendo que las mujeres --las damas-- no silban. Y con eso ya me cuido de no andar silbando por todos lados, pero a mi tambien me gusta. Es una senal de que uno anda contento por la vida, creo.

AleMamá dijo...

Gracias, Ale, por la corrección de ortografía. Gabriela debe haberse escandalizado con esta perlita de error, pero ¡no me dijo nada!
Besos

hna. josefina dijo...

Sí, muy raro pero aquí tampoco parece apropiado para las mujeres. De todos modos eso es de otra época ¿no?
Creo que los que silban bien -sean varones o mujeres- es muy lindo que lo hagan. En cambio no me gusta si no lo hacen bien, ninguno de los dos.
Saludos.

AleMamá dijo...

Está bueno el punto de vista, Josefina, jeje sólo te gusta si lo hacemos bien. Así me parece también, y no estoy segura si lo haré a gusto de los vecinos, pero a mi me encanta. ¿No te parece algo para re-pensar? ¿Qué tiene de malo o feo?
Salvo que hagamos un sonoro ¡Fiuuuu-fiuu! a alguno que no se nuestro marido, jeje

Gabriela dijo...

ja, ja, ja
No, no dije nada.
Sobre el artículo LA antes de los nombres femeninos, en el Perú no suena bien. Al menos a mí, me suena un poco vulgar, como dices que suena en Chile anteponerlo a los nombres de hombres.

Juan Ignacio dijo...

Ja, nunca había escuchado eso (ese punto de vista del silbido como algo vulgar).

No hay nada mejor que oir en la calle a alguien que va silbando.

Winnie dijo...

ja ja Ale no sé por qué pero no te imaginaba silbando...pero ahora que nos lo cuentas...¡claro que te pega! Eres una mujer alegre y vital....SILBA!! Un beso grande

Cyrano dijo...

Alemama:Silba y vive.Me parece perfecto que lo hagas cuando quieras y donde quieras. Nadie es dueño de nuestro buen vivir.

Marta Salazar dijo...

silvar es lo mejor que hay :)

ojo humano dijo...

Gran método para cuando una no quiere hablar.

AleMamá dijo...

¡Toyita! nada mejor que "hacerse el chifli", según mi madre, jeje
Besos

manuel barea dijo...

Eres de espíritu alegre. Seguro que es una bendición que te he dado Dios.
Me recuerda "¿El pájaro canta porque es feliz, ò es feliz porque canta?"
También te leo.
Saludos

AleMamá dijo...

Gracias por venir, Manuel y por tus palabras. Sí, creo que soy alegre, o al menos trato.

Algo de mí

Mi foto
Vitacura, Santiago de Chile, Chile
Mujer, hija, esposa, madre, y como consecuencia, ahora soy abuela de Sofía,Isabel y Juanito, por el momento, mientras llegan los demás que están en la mente de Dios. Tengo 5 hijos, uno de ellos es sacerdote católico. Una bendición inmerecida. Mi apodo bloguero de AleMamá se lo debo a mi yerno. Para distinguirme de su esposa llamada como yo (y no por culpa mía) comenzó a llamarme así. Muchos me lo escriben como "Alemana", pero no, se trata de Ale, como apócope de Alejandra, y mamá por el mejor papel que la vida me ha dado, el de esposa y madre. Soy chilena, católica, y con la cultura occidental muy metida en el alma. Me interesa la tecnología y la ciencia al servicio del hombre, considerando la Ley de Dios siempre, siempre, siempre.

Entradas más vistas