Un rincón para detenerse con buen clima en general. Como en todos los sitios, acá no faltarán los nubarrones, pero con que pasen, ¡todo en su lugar!



jueves, 17 de marzo de 2011

Llegada del otoño: música, sentimientos y sensaciones


La luz es diferente, el aire también y el ánimo para qué decir. Todo ha cambiado desde que hace un mes se fueron a su país mi hija con su familia. Parece poco, pero en un giro solar es suficiente para mudarlo todo.

He estado melancólica y un poquito depresiva, me figuro, por los pensamientos que se me cruzan. Es típico en esta época para mi, y eso que me gusta esta estación.

En un momento, en que cada rincón de estar en casa estaba ocupado, no tenía donde quedarme tranquila, salvo en mi dormitorio o en el living que es muy grande, pero también muy silencioso. Entrar ahí es entrar a una atmósfera cálida y suave. Es notable la sensación de arrullo que produce ese lugar. Ahí tengo mi sillón, libros, música en mi radio (me da pereza buscar y poner discos yo misma); tengo un  bordado, cuadernos y lápices para anotar alguna idea para posts, mis biblias (uso tres para comparar los textos), mi rosario y otras cosas. 

Verdaderamente es un oasis, pero no lo pienso muy seguido. Me ha hecho bien irlo definiendo al escribir esta entrada


9 comentarios:

Winnie dijo...

Querida Ale...vamos a la contra...aquí está entrando la PRimavera y su luz y a mi eso, como a ti, me dá la vida. Allá tus luces del día cambian...y sé que estás un poco bajilla...Te mando un beso enorme y sabes dónde estoy

Umma1 dijo...

Siento que no es el otoño, que por cierto en nuestros paises es muy hermoso. Sino la partida de los hijos, que siempre un pòquito duele, y remueve recuerdos.

Me alegra que tengas un refugio.Lo describiste de una forma tan cálida,que siento que entré en él.

Fernando dijo...

El cambio hacia el otoño siempre es triste, Alemamá, y eso que es la estación más bonita del año. Pero el frío, la oscuridad, son cosas que hunden el ánimo, sin duda.

Me gustó la descripción de tu rincón, y me hizo gracia lo de las 3 biblias. Me parece un tema que te daría para varios posts: tal texto es más claro, el otro es más profundo, ..., creo que es algo interesante.

Gabriela dijo...

En cambio yo, no soy muy amiga del verano. Prefiero los meses fríos, que en Lima son además plomizos y muy húmedos.
Sonará raro, pero esas caracterísiticas me hacen sentir en casa.

AleMamá dijo...

Sí, Fernando, uso tres, a saber:
La Biblia de Navarra, Sagrada Biblia de Nacar-Colunga y la Biblia de ls Sociedades Bíblicas Unidas. La que no uso porque encuentro que sus comentarios "explicativos" abusan, exigiendo mucho al texto, es la Biblia Latinoamericana, de gran expansión por acá.

La de las SBU me gusta por dos motivos principalmente: está escrita en lenguaje corriente y las ideas quedan bastante claras en pasajes oscuros por el lenguaje empleado, como es el caso de san Pablo, por ejemplo. La segunda es por los dibujos maravillosos de Annie Voloton, la ilustradora clásica de esa editorial. Me ayudan a rezar.

Saludos, amigo querido

ojo humano dijo...

Siempre de visita aunque a veces no comente, tú sabes, ayuno de internet por lo menos unos 6 meses.

Besos y bendiciones

Miriam dijo...

La melancolía que provoca el otoño, tiene su encanto.
La descripción de tu rincón, es genial. Suena realmente a hogar, al recogimiento, paz y frescura de de una cabaña en la montaña
Ah.. y me ha encantado tb lo de las tres biblias y la explicación¡

AleMamá dijo...

Toyita (Ojo Humano), ¡qué felicidad que no hayas abandonado a tus amigos pese a haberte ido de los blogs! Espero que el ayuno sea temporal y no que te hayas ido al desierto para siempre.

Besos, amiga querida.

AleMamá dijo...

Umma, gracias por venir. Pasas poco por acá, pero siempres es una alegría.
Besos

Algo de mí

Mi foto
Vitacura, Santiago de Chile, Chile
Mujer, hija, esposa, madre, y como consecuencia, ahora soy abuela de Sofía,Isabel y Juanito, por el momento, mientras llegan los demás que están en la mente de Dios. Tengo 5 hijos, uno de ellos es sacerdote católico. Una bendición inmerecida. Mi apodo bloguero de AleMamá se lo debo a mi yerno. Para distinguirme de su esposa llamada como yo (y no por culpa mía) comenzó a llamarme así. Muchos me lo escriben como "Alemana", pero no, se trata de Ale, como apócope de Alejandra, y mamá por el mejor papel que la vida me ha dado, el de esposa y madre. Soy chilena, católica, y con la cultura occidental muy metida en el alma. Me interesa la tecnología y la ciencia al servicio del hombre, considerando la Ley de Dios siempre, siempre, siempre.

Entradas más vistas