Un rincón para detenerse con buen clima en general. Como en todos los sitios, acá no faltarán los nubarrones, pero con que pasen, ¡todo en su lugar!



domingo, 8 de enero de 2006

Puerto Oscuro en haikus



aire humedecido
por sonido incansable
sal yodo y arena





sobre la arena
restalla la espumante
oleada canosa
avanza la ola
coronada de espuma
ruedan guijarros



cartas crujientes
manos ágiles barajan
se oye una risa








Si has buscado algo de Puerto Oscuro, también puedes verlo en fotos acá*

4 comentarios:

AleMamá dijo...

Post scriptum:
No sé mucho de haikus; me imagino que deben explicarse por si mismos, sin apoyo de imagenes, pero no estoy segura de ello.

Suponiendo que los originales haikus no las usaban decidí entretenerme en la playa describiendo lo que pasaba en UN instante que --me han contado-- es la idea de estos versos minimalistas de 17 ó 18 sílabas y tres lineas sin puntuación.

Los hice sin más imágenes que mis sentimientos y sensibilidad, pero para el blog busqué posteriormente las imágenes que los apoyaran visualmente.

Si alguno me puede informar más, se lo agradezco.

Es sencillo aparentemente hacer haikus, pero trasmitir lo sentido y vivido es otro cantar. ¿Lo habré logrado?

Hice muchos más, pero los cansaría. Si me animo, haré una "segunda entrega".

AleMamá dijo...

Gracias. Lo peor es esperar que es estar expuestos a acontecimientos que no controlas, pero Dios sabe más. En eso, no hay dudas, por suerte :)

almena dijo...

Es complicado hacer haikus. Son casi una forma de poesía "espiritual". Y a la vez simple. La naturaleza, el fulgor de una idea, de un instante casi divino. Son hermosos los que has creado. Yo también lo intento a menudo...

Ale, espero, deseo, que todo esté transcurriendo favorablemente.
Un abrazo grande

edumangia dijo...

Ale, hermosos tus haikus. Estoy haciendo un trabajo sobre Budismo Zen y vengo leyendo varios de ellos. Transmiten esa sensación fugaz e intensa, ese sentimiento sencillo pero profundo. Gracias...

Algo de mí

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Vitacura, Santiago de Chile, Chile
Mujer, hija, esposa, madre, y como consecuencia, ahora soy abuela de Sofía,Isabel y Juanito, por el momento, mientras llegan los demás que están en la mente de Dios. Tengo 5 hijos, uno de ellos es sacerdote católico. Una bendición inmerecida. Mi apodo bloguero de AleMamá se lo debo a mi yerno. Para distinguirme de su esposa llamada como yo (y no por culpa mía) comenzó a llamarme así. Muchos me lo escriben como "Alemana", pero no, se trata de Ale, como apócope de Alejandra, y mamá por el mejor papel que la vida me ha dado, el de esposa y madre. Soy chilena, católica, y con la cultura occidental muy metida en el alma. Me interesa la tecnología y la ciencia al servicio del hombre, considerando la Ley de Dios siempre, siempre, siempre.

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